La búsqueda de la felicidad se ha vuelto una obsesión para muchos y una idealización para otros. Parece que la ansiada felicidad no acaba de desvelar sus caras y nos cuesta encontrarla o, lo que es peor, identificarla cuando la tenemos delante.
Es posible que no creas en la felicidad o que sí creas pero la consideres un estado temporal, fruto de emociones causadas por las circunstancias. Mi objetivo hoy no es hacerte cambiar de opinión. Simplemente quiero compartirte algunas pautas que puedan ayudarte a creer en la felicidad de la forma en la que muchos divulgadores de ciencia y espiritualidad creen.
Los 5 errores típicos que cometemos al pensar en felicidad:
- Es la consecuencia de nuestros éxitos: pensamos que si conseguimos ese trabajo, esa pareja, ese coche de ensueño ,seremos al fin felices. La realidad es que la ecuación está al revés. Cuando seamos felices conseguiremos todo lo que nos propongamos porque todo nuestro ser estará preparado para engendrarlo.
- Es incompatible con el dolor: todos los sentimientos del mundo son válidos y necesarios, es la magia del ser humano, sentir conscientemente. Y la felicidad puede convivir con todos ellos, siempre y cuando los aceptemos, no los retengamos ni los enquistemos en nuestra identidad.
- Es externa: la felicidad nunca puede provenir del exterior porque el exterior es mutante y la felicidad, si existe, debe ser permanente, inamovible. De modo que no puede darte felicidad algo que, de golpe y porrazo, puede quitártela.
- Se representa en forma de risa: la felicidad no es una carcajada, eso es una respuesta a un estímulo momentáneo. Puedes ser feliz y reir a carcajadas pero la felicidad real se manifiesta en forma de paz, armonía, sonrisa sutil, calma.
- Es individual: la felicidad es mayor cuando es compartida. Del mismo modo que el sufrimiento es menor cuando se comparte. Eso no quiere decir que no sea interna, es ciertamente fruto de nuestra paz interior, pero es tan potente que puede contagiarse a través de un simple gesto de amor.
Feliz búsqueda de la felicidad amigos, os deseo un camino agradable y consciente.