Hola amig@,
Cuanto más avanzo en mi experiencia como Coach de salud holística, más confirmo que, a medida que progresamos juntos en este programa, os animáis a explorar nuevas y profundas dimensiones de vosotros mismos. Una de esas dimensiones es la energética. Aunque no suelo introducir este tema al principio, hoy quiero hablarte de ella.
Lejos de ser algo esotérico o «de brujas», la energía es ciencia. Todo en el universo, incluyéndote a ti, está hecho de energía que vibra y se mueve. Lo interesante es que cuando aprendes a regular tu energía, puedes transformar cómo te sientes, piensas y actúas.
Un Caso Real: Más Allá de la Mente
Quiero compartirte la historia de una de mis clientas . Durante años intentó superar su ansiedad exclusivamente desde su mente: aceptaba, relativizaba y buscaba racionalizar cada pensamiento catastrófico. Y aunque a veces lograba calmarse temporalmente, la ansiedad siempre volvía.
Cuando empezamos a trabajar juntas, decidimos explorar algo diferente: salir de la mente y entrar en el cuerpo. Incorporamos meditación , técnicas para sentir el calor del propio cuerpo y herramientas basadas en los chakras para equilibrar su energía.
Ella terminó el programa y quiso seguir trabajando conmigo para perfeccionar. Hoy, ella describe haber encontrado una calma completamente nueva, una que no puede explicar desde su mente. La ansiedad ha dejado de ser una constante en su vida, y su perspectiva sobre sí misma y sus emociones ha cambiado por completo.
Prácticas Energéticas que Tú También Puedes Probar
Aquí tienes algunas herramientas simples que pueden ayudarte a reconectar contigo mismo y regular tu energía:
- Meditación Guiada
Dedica 10 minutos al día a una meditación en la que visualices una luz cálida recorriendo tu cuerpo. Esto ayuda a relajar la mente y centrar la energía. - Respiración Profunda
Realiza inhalaciones lentas y profundas, reteniendo el aire unos segundos antes de exhalar lentamente. Es una forma efectiva de reducir el estrés y calmar tu sistema nervioso. - Trabajo con los Chakras
Concéntrate en sentir el centro de tu pecho (chakra del corazón ) o la base de tu columna (chakra raíz). Imagina que los llenas de luz cálida y energía estable. - Contacto con el Cuerpo
Usa tus manos para calentar suavemente tus brazos o abdomen mientras respiras profundamente. Esto crea una sensación de seguridad y conexión contigo mismo.
Todo Es Ciencia, Pero No Me Creas: Cuestiónalo
La energía no es magia, es biología. Las prácticas como la meditación, la respiración o el contacto corporal están respaldadas por estudios que muestran cómo pueden reducir el estrés, equilibrar el sistema nervioso y crear un estado de bienestar duradero.
Mi invitación para ti es simple: no me creas.
Pruébalo. Dedica unos minutos al día a una de estas prácticas y observa cómo te sientes. Quizá, como mi clienta, descubras una calma que nunca antes habías conocido.
Nos leemos pronto,
Mónica